Es probable que la mayoría de los inversores estén entusiasmados por dejar 2022 en el retrovisor. El S&P 500, que es un amplio índice de las 500 mayores empresas por capitalización bursátil de Estados Unidos, terminó el año con una caída del 19%, su peor resultado anual desde 2008, cuando el mundo se enfrentaba a la Gran Recesión. Estoy seguro de que todo el mundo espera que vengan días mejores.
De cara a 2023, no faltan predicciones sobre el rumbo que tomará el mercado bursátil este año. Examinemos lo que piensa uno de los principales bancos y cómo deberían manejar esta información los inversores.
Un rendimiento plano en 2023
Según el banco de inversión Goldman Sachs, el S&P 500 terminará 2023 en el nivel de los 4.000 puntos, esencialmente plano en comparación con el final de 2022. Los estrategas de la entidad prevén que los ingresos de las empresas del S&P 500 aumenten un 4% este año, y que el beneficio por acción se mantenga plano como consecuencia de la compresión de los márgenes.
El objetivo de 4.000 de Goldman Sachs asume que la Reserva Federal es capaz de frenar la inflación disparada con un “aterrizaje suave”, o una situación en la que el aumento de los precios se controla sin ralentizar seriamente la economía. Sin embargo, si se produce una recesión en 2023, Goldman Sachs prevé una caída del 20% para el S&P 500 en 2023.
¿Cómo interpretar esto?
Para ser completamente claro, yo tomaría estas proyecciones, por muy prestigiosa que sea la institución financiera, con un enorme grano de sal. Estos estrategas del mercado se equivocan más a menudo de lo que aciertan. Pensaban que el S&P 500 subiría un 9% en 2022, lo que estaba muy lejos de la realidad. Y antes de eso, dijeron que el S&P terminaría 2021 en 4.300, muy lejos de los 4.766 en los que terminó en realidad.
No creo que nadie pueda predecir con ningún nivel de certeza lo que nos depararán los próximos 12 meses en lo que respecta al mercado bursátil. Para entender lo imposible e inútil que es hacer previsiones sobre el mercado, podemos fijarnos en 2020 como lección de historia. Si supiéramos que una pandemia paralizaría la economía mundial, seguro que habríamos adivinado que el mercado terminaría 2020 en números rojos. Pero sabemos que estaba equivocado, ya que el S&P 500 subió un 16% ese año.
Dicho esto, no tengo ni idea de lo que hará el S&P 500 en 2023. Y estoy completamente de acuerdo con esta realidad. Usted también debería estarlo. Su principal preocupación debería ser centrarse por completo en lo que puede controlar, y esto incluye cuánto está invirtiendo de forma recurrente, así como qué acciones está comprando.
Puede hacerlo con independencia de lo que haga el mercado bursátil, beneficiándose de lo que se denomina promediar el costo en dólares. Esto significa simplemente que aprovechará múltiples puntos de precio, eliminando la necesidad de tomar el tiempo del mercado. El objetivo general es ser continuamente un comprador neto de acciones, con la vista puesta en el largo plazo.
Una estrategia sólida implica invertir en empresas que ofrezcan a los clientes productos y servicios superiores, posean ventajas competitivas, tengan sólidas perspectivas de crecimiento y coticen a valoraciones atractivas. Amazon y Alphabet son dos ejemplos que me vienen inmediatamente a la mente. Usted puede poseer cómodamente estas empresas durante los próximos cinco años y más allá.
Leer también: ¿Sabes qué es el índice de captación de mercados alcistas?